– ¡Oh pero por el amor de mi santa madre, su abuela y su primas quienes cocinaban delicioso!, ¿qué está haciendo él aquí? – dijo Magician claramente sorprendido de ver que la mano en sombras que había jalado Seamus se había convertido en un brazo dentro de una camisa color marrón, aun cuando Magician había nacido como una sombra tenía todo el conocimiento y recuerdos de su yo real, y sabía claramente que se trataba del padre de James.

– Que tal Seamus, me esperaba un recibimiento un tanto más agresivo que un simple “hola traidor”.

– Creo que enfrente de todos los niños hay que guardar la compostura, ¿no Sullivan?- respondió señalando con una mano a James y a Orb quienes seguían en el suelo.

– Y yo creo que con uno que guarde la compostura es suficiente – interrumpió Magician dejando de lado su particular hablar y su casi eterna sonrisa, levantó una de las manos y rápidamente hizo un pequeño gesto con los dedos, en cuestión de instantes emitió una luz azul su cuerpo y desapareció apareciendo instantáneamente detrás de Sullivan, Magician rápidamente movió la mano que no había utilizado y la puso en la espalda de James padre antes de que este pudiera reaccionar, una pequeña esfera de luz azul apareció en su palma apenas por unos fragmentos de segundos y explotó en un gran destello que lanzó a gran velocidad el cuerpo de James padre, Seamus quien aun lo tenía sujeto a duras penas lo pudo soltar no sin antes perder el equilibrio por el jalón que el cuerpo que ahora volaba le dio.

El cuerpo de James Sullivan por algunos segundos parecía no contar con huesos, la fuerza con la cual salió volando además de lo sorpresivo de lo mismo no lo dejó reaccionar hasta que ya se encontraba a pocos segundos del suelo, apenas el suficiente tiempo para alcanzar a cubrirse el rostro con los brazos antes de impactar fuertemente el suelo.

– ¿No crees que esa no es la manera correcta de saludarlo?

– ¿Y tú no crees anciano mago entre los ancianos magos que aceptar la pequeña apuesta inocente que te hube propuesto cuando la situación se prestaba para divertirnos con los muchachos sabiendo que el que no debiéramos ni ver sería visto? – gritó Magician mientras se volvía a acomodar su larga bufanda al tiempo que caminaba hacia donde el cuerpo de Sullivan había aterrizado.

РPosiblemente el sentirlo si influyo un poco, pero, ahora me debes algo, y cr̩eme que no lo olvidar̩.

– Luego el tiempo estará disponible para que tengamos tiempo de discutirlo, ahora déjame saludar a mi “hijo”.

Sullivan se encontraba aun en el suelo para cuando Magician llegó a donde él estaba, se había dejado de cubrir el rostro y ahora se agarraba fuertemente las costillas con las manos, su respiración era forzada y dispar, se podía notar que se había sofocado en el impacto.

– Y permíteme preguntarte hijo que ahora en el piso está, ¿qué te trae por estos rumbos?

– Odell – susurró lastimeramente Sullivan entreabriendo los ojos por el dolor que sentía.

– Vaya, ¿y qué quieres con el fabuloso muchacho?.

– Espera… espera – respondió mientras intentaba recuperar el aire.

– Creo que esperar no es uno de mis fuertes.

– El… mayor… ya… está…

– Oh mira, algo que pudiera interesarnos escuchar.

Seamus miraba fijamente a los dos muchachos que estaban en el suelo, James aun parecía como si estuviera desmayado mientras que Orb ya se estaba reincorporando con una expresión de derrota en su rostro.

– Disculpe… señor Seamus… ¿quién es él y qué hace aquí?

– Ese… supongo que no habrá modo de esconderlo… es el padre de James.

– ¿Y qué hace aquí?

– Es lo que Magician va a intentar averiguar.

– ¿Pero… si es el padre de James porqué es que lo hizo volar de ese modo?

– Eso es algo que a mí no me toca decir, digamos que, es un problema familiar entre aquellos dos.